Presente por cuarta vez en las 24 Horas de Le Mans, con un Porsche con los colores de su escudería, el actor estadounidense Patrick Dempsey se dedica este año por entero a su pasión automovilística, para tratar de demostrar que tiene futuro en los deportes de motor.

No hay lugar por tanto para las preguntas sobre “Grey’s Anatomy”, la popular serie de televisión hospitalaria en la que ha interpretado durante 11 temporadas a Derek Shepherd, ni para otras preguntas sobre su vida privada.

Para ser invitado a seguir a Patrick Dempsey en su visita al “Pabellón de las mujeres”, creado este año en el Automóvil Club del Oeste (ACO), las reglas son estrictas: el actor ha viajado a Francia para la carrera y sólo quiere hablar de eso.

En la víspera de la salida, prevista para las 13h00 GMT del sábado, Dempsey está totalmente concentrado en su Porsche N.77, de su escudería Dempsey Proton Racing, que compartirá con el estadounidense Patrick Long y con el alemán Marco Seefried.

“Estamos en la fase en la que intentamos establecer la estrategia de carrera, analizamos los datos (de los ensayos). Y respondemos a algunas solicitudes de la prensa”, afirma en una entrevista con la AFP, con una de esas sonrisas que han seducido a los telespectadores de todo el mundo.

Dempsey conoce bien Le Mans, donde ya participó en las míticas 24 Horas en 2009, 2013 y 2014, mejorando cada vez su lugar en la clasificación final.

“Siempre es algo muy especial estar en Le Mans. Hay una parte de comodidad, en el sentido en el que uno sabe qué hacer y lo que ha hecho”, explicó.

Este año su gran objetivo el el campeonato mundial de resistencia (WEC), en la categoría GTE-Am, con “Am” de “Amateurs”, pese al gran nivel de los pilotos.

Gracias a este compromiso a tiempo completo, “muchas cosas que hacía con dificultad en años anteriores he podido hacerlas, así que ahora espero concentrarme en la carrera”, explicó.

Dempsey asegura que nunca le preocupó qué pensaron los pilotos profesionales cuando le vieron aparecer por primera vez hace seis años en las 24 Horas de Le Mans, acaparando la atención de los fotógrafos por lo inusual de ver a un actor famoso al volante.

Jean-Francois Monier | AFP

Jean-Francois Monier | AFP

Tras Paul Newman y Steve McQueen

Lo que está claro es que por mucho que se esfuerce es complicado que sea percibido como un piloto más.

“Forma parte del espectáculo, pero hay que ser capaz de tomar distancia de ese tipo de cosas. Los primeros años era un caos. Uno quiere pasar tiempo con los fans, firmar autógrafos, pero hay mucha gente y una excitación contagiosa”, explica.

No es un pionero: en Estados Unidos hay ya otros ejemplos de actores famosos-pilotos.

“Siempre hubo fascinación por los coches y las carreras en Hollywood. Los pilotos más destacados fueron Paul Newman y sobre todo Steve McQueen, aquí con su película +Le Mans+”, recuerda.

Coche y televisión, dos carreras que intenta actualmente compaginar, produciendo una miniserie basada en el libro “The Limit”, que habla de la lucha entre el estadounidense Phil Hill y el alemán Wolfgang Von Trips por el título de campeón del mundo de Fórmula 1 en 1961, dentro de la Scuderia Ferrari.

Ese proyecto serviría a Dempsey para cumplir otro deseo: “Quiero pasar más tiempo en Europa, vivir aquí, correr aquí. Me encanta estar aquí, sobre todo en el campo”.