El Senado de Paraguay derogó este jueves la ley que otorgaba inmunidad, desde 1997, a la sede de la Conmebol, que se erige en las afueras de Asunción, informaron fuentes parlamentarias.

En la plenaria, los senadores no presentaron reparos al documento que fundamenta la derogación, en base a los escándalos desatados en la FIFA a fines de mayo pasado en su sede de Zurich y que salpican a varios dirigentes del fútbol sudamericano.

La iniciativa había recibido media sanción hace una semana por parte de la Cámara de Diputados.

El presidente de la Conmebol, el paraguayo Juan Angel Napout, dijo que las puertas de la institución están abiertas a las investigaciones.

“No pondremos problema”, dijo el dirigente al prestar su acuerdo para poner fin a la inviolabilidad jurídica de la Confederación Sudamericana.

“Es imposible que sigan existiendo blindajes para la corrupción, para la protección de los delitos económicos a gran escala y para la protecciones de corporaciones criminales”, fundamentó en el pedido de derogación de la ley, el diputado Hugo Rubín.

El propio presidente de Paraguay, Horacio Cartes, impulsó la derogación.

“Esto está dado en la política que el Presidente impuso en materia de traer transparencia tanto en el ámbito público como privado. Todos debemos someternos al control del contralor de la opinión pública”, dijo en ese sentido el ministro de Relaciones Exteriores, Eladio Loizaga.

Explicó que conforme a las normas del derecho internacional y a los acuerdos que Paraguay ratificó, solamente los organismos intergubernamentales tienen inmunidad en cuanto a la inviolabilidad de la sede y su documentación.

“La Conmebol no es un organismo intergubernamental. Entiendo que el Presidente de la Conmebol ya anunció que ellos están de acuerdo con eso”, remarcó el canciller.

El presidente Cartes debe promulgar la ley en un término no mayor de 30 días para su vigencia plena.

Los expresidentes de la Conmebol, el uruguayo Eugenio Figueredo y el paraguayo Nicolás Leoz (en arresto domiciliario), así como el extitular de la Confederación Brasileña de Futbol, José Maria Marin, y el venezolano Rafael Esquivel, están detenidos en el marco del escándalo en la FIFA, que derivó en la renuncia de su titular Joseph Blatter.