Ante el juez Michel González en los tribunales de Rancagua se decretó este jueves el sobreseimiento definitivo de la querella por estafa que interpuso Hugo Silva, representante de Silca, en contra de la empresa Caval, de Natalia Compagnon y Mauricio Valero.

La acción legal fue interpuesta en el marco de la compra y venta de terrenos de Machalí donde el cambio en los usos de suelo era fundamental para que Silva desistiera de esta transacción.

El fiscal regional de O’Higgins, Luis Toledo, explicó que se sobreseyó la querella porque no había un detrimento económico ni patrimonial en contra de Silva, por lo que los abogados desistieron de la querella.

En tanto Jessica Norambuena, abogada de Natalia Compagnon, se mostró satisfecha con la determinación. “El daño familiar que ha reportado Natalia ha sido tremendo y estimamos que fue una decisión correcta”, indicó la representante.

El 14 de mayo ambas compañías firmaron una escritura pública ante notario, donde pactaron que los $2.000 millones, de uno de los documentos bancarios que había sido incautado por la Fiscalía de O’Higgins en el marco de la investigación, se dividirían en partes iguales a repartir. Este acuerdo determinó el cierre de esta arista del caso.

El Ministerio Público continúa indagando el negocio inmobiliario de Caval en el marco de la denuncia por tráfico de influencias y uso de información privilegiada que hicieron legisladores de Renovación Nacional.

Igualmente, el persecutor Toledo confirmó que en los últimos días se han ingresado al Ministerio Público dos denuncias y una querella más en relación a este caso, lo que podría ampliar el espectro investigativo para el equipo de fiscales.