Decenas de miles de personas se aprestan a salir a las calles de Hong Kong este jueves para conmemorar la represión de 1989 en la plaza Tiananmen de Pekín y reclamar una verdadera democracia en la antigua colonia británica.

Este año la manifestación tendrá un significado particular por el contexto de tensiones entre los prodemócratas y el ejecutivo local, apoyado por China.

“Esto es una lucha permanente por la justicia”, lanzó Richard Tsoi, de la Alianza de Apoyo a los Movimientos Democráticos y Patrióticos en China, organizadora de la manifestación.

Los organizadores del acontecimiento esperan una afluencia de 150.000 personas en la vigilia con velas que tendrá lugar a partir de las 20:00 (12:00 GMT) en el parque Victoria.

Grupos de apoyo al Partido Comunista Chino (PCC) también tienen previsto salir a las calles el jueves.

La concentración anual del 4 de junio en Hong Kong constituye el principal homenaje en China del aplastamiento de la primavera de Pekín, cuya memoria está oficialmente prohibida por Pekín.

En la madrugada del 4 de junio de 1989, tras siete semanas de manifestaciones para exigir reformas democráticas en China, decenas de miles de soldados respaldados por centenares de tanques abrieron fuego contra la multitud hasta llegar a la plaza de Tiananmen.

No se ha facilitado ningún balance oficial pero fuentes independientes aseguran que hubo entre varios centenares y un millar de muertos en Pekín, sin contar los fallecidos en el resto de China.