En un programa español llamado “Viajando con Chéster”, el cantante Alejandro Sanz confesó que hace unos años fue chantajeado y drogados por dos empleados, con objeto que el artista les pagara dinero a cambio de resguardar su intimidad.

Con más de 25 millones de copias de sus discos vendidas en todo el mundo y más de dos décadas desde que debutó en los escenarios, Sanz logró convertirse en un exitoso cantante y la prensa no dudó en poner ojo sobre él. Es por lo anterior, que en 2007 dos de sus empleados exigieron que Alejandro les pagara más de 300 millones de pesos (chilenos), para resguardar su intimidad.

Fotografías íntimas, información privada sobre su divorcio con Jaydy Michel y otros datos, son los que conocían sus trabajadores, quienes además drogaban al cantante con sustancias que aplicaban en sus comidas. “La mujer me ponía pastillas para dormir en la comida. De película de miedo, te lo juro”, confesó, según contó el sitio Variety.

“Le dije (al empleado), ‘esta pelea la empiezas tú, pero la voy a ganar yo. Yo te voy a decir cuándo se va a acabar’”, recordó el intérprete de “Corazón parti’o”, en el programa.

Con la experiencia ya superada, Alejandro aseguró que aún confía en la gente. “Hay una cosa que tengo clara: Nadie me va a enseñar a desconfiar. Prefiero confiar y equivocarme a tener que vivir con el yugo del miedo”.

Actualmente Sanz, está invitado para ser juez en un programa de talentos (“La Banda”) en España junto a Laura Pausini y Ricky Martin–, y continúa promocionando su último álbum “Sírope”.

https://youtu.be/x0n3JKL7Qkc