El español David Ferrer, séptimo cabeza de serie, solventó por la vía rápida su debut en Roland Garros y derrotó este martes al eslovaco Luckas Lacko, en tres mangas por 6-1, 6-3 y 6-1, en 1 hora y 22 minutos de juego.

Ferrer, de 33 años y finalista en 2013 (derrota ante Rafael Nadal), no dejó ninguna opción a Lacko, 94º de la ATP y que nunca superó la segunda ronda de Roland Garros.

“Ha sido un partido relativamente cómodo, en el segundo set él ha sacado mejor y me lo ha puesto más difícil pero en todo momento he tenido el partido bastante controlado”, señaló Ferrer.

“Ha fallado más de lo normal y a partir de ahí ha sido un partido rápido”, añadió.

El triunfo de este martes fue el 300º de Ferrer en tierra batida, pero en rueda de prensa restó importancia a la cifra.

“Es sólo un número. En esta superficie nos hemos criado, prácticamente desde que éramos niños estamos en pistas de tierra”, recordó.

“Pero con el paso de los años me gusta más la pista rápida porque no es tan dura físicamente, pero mi juego se adapta muy bien a la tierra”, añadió.

En la segunda ronda el tenista de Castellón jugará con su compatriota Daniel Gimeno Traver, que este martes ganó al brasileño Joao Souza.

“Es un jugador que está con confianza, que tiene muy buena derecha y hay que ir con mucho cuidado, tendré que jugar bien para ganar ese partido, soy consciente de ello”, señaló.