Materialistas, chismosas, soberbias, caprichosas y con un alto grado de ambición y frivolidad, son todas características que describen a la perfección a este nuevo fenómeno social denominado “Betches”, prototipo urbano que va en alza y cuyo principal objetivo es mantenerse guapas, delgadas y jóvenes.

Si bien utilizar el término bitch (perra) para referirse a una mujer era el insulto más grande y ofensivo, actualmente el concepto betch llega a romper con ese prejuicio, y pese a ser una palabra similar, hace más referencia a una mujer chic, estilosa y cargada de glam.

Tal es el revuelo que ha causado este grupo de chicas, que en junio de 2014 el diario New York Times publicó un artículo sobre esta tribu compuesta principalmente por jovencitas de entre 18 y 26 años que destacan por tener un alto poder adquisitivo, se mantienen a base de productos light y cuyas reglas de vida son: ser difíciles, adineradas y esbeltas; por lo tanto, la pobreza y gordura están prohibidas dentro de sus parámetros.

Este nuevo estereotipo propio de las grandes ciudades, se propagó en América y Europa con la creación del portal BetchesLoveThis, plataforma en donde se dictan los patrones a seguir, siendo sus musas indiscutidas Paris Hilton y Kim Kardashiam, ambas celebridades que gozan de una gran exposición mediática a nivel mundial.

Asimismo, este espécimen ha basado su ideología en la serie Gossip Girl como también en las historias de Chicas Pesadas, cinta de 2004 que destacaba a una frívola Regina George como la líder indiscutida de “Las Plásticas”, jovencitas superfluas cuya única inquietud eran las fiestas, la moda y las dietas.

A24

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Tal es el interés por seguir esta tendencia, que las betches ya publicaron su primer libro titulado ‘Nice is just a place in France: How to Win at Bassically Everything’ y además tienen su propia línea de ropa y accesorios de moda. Todo esto ha llevado a que se genere un impacto social y que muchas niñas busquen ser, pensar y vestir como ellas.

Tal auge tiene directa relación con las publicaciones promovidas en su web BetchesLoveThis, donde se encuentran artículos relacionados a moda, estética, sexualidad y consejos de cómo relacionarse con los padres, entre otras cosas propias de este estilo de vida.

Asimismo, se dan consejos de cómo mantenerse delgadas, tips para comportarse en una primera cita, qué hacer para entrar a un bar y conseguir bebidas gratis, además de sugerencias de lo que debes hacer para que tu compañera de curso realice las tareas por ti. En general, todo acerca de esta nueva corriente que avanza de manera vertiginosa.

Si bien no existen razones específicas del surgimiento de estos fenómenos sociales, se debe considerar que vivimos en un contexto socioemocional donde la explosión tecnológica ha generado una sobre-exposición de la vida privada en las redes sociales.

“Tal escenario ha provocado un cambio radical en los valores de la sociedad, una en donde prima el status, la imagen y el trabajo por sobre el tiempo libre. Factores que sumados a la velocidad con que transcurre la vida cotidiana, las escasas relaciones personales y los nulos espacios de reflexión, crean el contexto apto para que emerjan este tipo de modas” sostuvo Carolina Venegas, Psicóloga y Docente de Universidad de Concepción.

Por esta razón, las jovencitas adoptan estas tendencias en un periodo de individualización, etapa en que comienzan a construir su propia identidad a partir de una dinámica de prueba y error de diferentes comportamientos sociales, escenario en que actualmente son las betches las reinas del cibermundo, transformándose en el segmento más valorado e imitado por ellas.

La frivolidad presente en esta élite tiene directa relación con el cambio en los valores que prevalecen en la sociedad actual y sobre todo en el entorno que rodea a las chicas.

“Por ejemplo, es probable que las betches crezcan en un ambiente con padres que han centrado sus esfuerzos por proveer a sus hijas de bienes materiales más que de contención familiar. Lo cual, al sumarlo a la exposición de los medios de comunicación masivos, escasamente críticos y reflexivos, crean a personas que piensan que el dinero y la imagen son recursos esenciales para destacar”, resaltó la profesional.

Actualmente es el poder de las redes sociales el máximo factor que promueve este concepto de vida, el cual es apoyado en su mayoría por las revistas de modas, la publicidad y los canales de televisión para jóvenes. Todos estos medios transmiten que el éxito se ve reflejado en las joyas, los autos, la belleza externa y los lujos adquiridos.

Bennett Raglin | Getty Images for DuJour | AFP

Bennett Raglin | Getty Images for DuJour | AFP

Si a lo anterior sumamos la presión del grupo, podemos ver que las betches entran en un camino desenfrenado por formar una identidad basada en la fortuna y el cuerpo como estrategia de diferenciación y superioridad.

“Es probable que si hacemos una evaluación psicológica de quienes componen esta tribu, nos encontraremos con personas deficientes en la formación de su identidad, con una clara valoración de sí mismas como también de elementos externos y materiales. Del mismo modo, se percibe una prevalencia mayor de trastornos de la alimentación, un locus de control externo, que en términos simples implica vivir desde y hacia el entorno más que hacia sí mismo”, afirmó Carolina Venegas.

Si esta tendencia se apodera de la capacidad de las jóvenes de reflexionar y establecer límites para vivir su moda, el principal conflicto de llevar este estilo de vida iría en directo deterioro de su integridad física y mental. “Podemos pensar en algo tan concreto como habituación a conductas delictivas o impulsivas, trastornos de personalidad y socio-emocionales”, enfatizó la profesional.

Si existe una mayor educación y preocupación de los padres por formar un pensamiento crítico, donde se valoren las fortalezas personales y se respete la diversidad, serán las mismas jóvenes quienes notarán que estas tendencias sólo reflejan un vacío de lo que significa ser persona.

“Si educamos – en el sentido real – probablemente también podrán notarlo quienes compran un auto lujoso a 10 años, o se esmeran por adquirir el traje más costoso de una tienda exclusiva. Como ves, las betches son sólo la punta del iceberg de las carencias de un pensamiento crítico y de identidad que vaga en una sociedad materialista y superficial” concluyó la experta.

Miguel Medina | AFP

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