“Las opiniones de Amplitud se fueron centrando en la política de elite, en la oposición tradicional a la que todos están acostumbrados”, aseguró la diputada Karla Rubilar, para justificar su renuncia al movimiento.

La parlamentaria indicó que se fue dando cuenta de que las prioridades de Amplitud no las comparte, argumentando que se tornó como la típica oposición de críticas duras, estilo con el que aseguró no se siente identificada.

A la parlamentaria no le habrían parecido ciertas declaraciones como por ejemplo cuando se criticó la gestión del Gobierno en el marco del aluvión del norte del país, ya que recién habían pasado unos días y no se podía hacer una evaluación del trabajo realizado.

Luego el presidente del movimiento, el diputado Joaquín Godoy puso un plazo de 72 horas al ministro de Hacienda, Rodrigo Váldes para que pidiera la renuncia del director del Servicio de Impuestos Internos, Michelle Jorratt, hecho que ocasionó la molestia y que fue lo que finalmente gatilló la salida de la diputada.

Rubilar expresó que habría esperado una postura más positiva con respecto al nuevo ministro y desearle que le vaya bien, dado eso expresó que su determinación pasó para que Godoy no se olvide de que tiene que pensar en todos los adherentes.

El presidente de Amplitud, el diputado Joaquín Godoy lamentó la renuncia de Rubilar y expresó que las decisiones de enfrentar los temas de contingencia se realizan de forma participativa y que lo que se planteó frente a Jorratt fue conversado previamente.

La salida de la diputada Rubilar deja en una situación compleja al movimiento que está en vías de convertirse en partido, ya que pierden a un parlamentario, quedando sólo tres, la senadora Lily Pérez y los diputados Pedro Browne y Joaquín Godoy, todos ex RN.

Hoy en el Congreso en Santiago, Amplitud hará su primer Consejo General y firmará el acta de constitución como partido político, instancia donde asistirán representantes de Fuerza Pública y Red Liberal.