Alemania conmemoró el viernes los 70 años del fin del nazismo, el 8 de mayo de 1945, celebrando una “liberación” tanto para el país como para toda Europa, durante una ceremonia en el Reichstag, sede de la cámara baja del Parlamento.

El fin de la Segunda Guerra Mundial fue “para todo el continente un día de liberación” pero no “un día en el que los alemanes consiguieron liberarse por sí mismos”, declaró el presidente del Bundestag, Norbert Lammert, que agradeció a aquellos que, pagando “el precio de pérdidas impensables, pusieron fin al reino del terror nazi”.

“Hoy, recordamos a los millones de víctimas de una tarea de destrucción sin precedentes, perpetrada contra otros pueblos y naciones, contra los eslavos, contra los judíos europeos”, agregó Lammert.

Al acto asistieron la canciller alemana, Angela Merkel, el presidente, Joachim Gauck, y los diputados de las dos cámaras del Parlamento alemán.

El 70º aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial ocupó gran parte de la prensa alemana del 8 de mayo.

“El fin, el principio”, titulaba el periódico de Múnich Süddeutsche Zeitung, que dedicaba diez páginas al acontecimiento.

“El país ha cambiado: en unas décadas, se ha establecido una sociedad libre. Los hijos y los nietos se esfuerzan por comprender este pasado sombrío”, destacaba el diario conservador Die Welt.

Según un sondeo de YouGov publicado a finales de abril, el 76% de los alemanes considera el fin de la Guerra una liberación de su país, más que una derrota.