Los ex presos políticos de San Antonio, reiniciaron la huelga de hambre que había sido interrumpida por problemas de salud.

A pocos días de retomar la medida de presión, Jorge Ulloa de 68 años y quien se unió este lunes a los otros tres que comenzaron con el proceso en abril, se descompensó por su dependencia a la insulina, según relató a Radio Bío Bío, Donato Cisternas, ex prisionero político e integrante de la huelga.

Los demás movilizados, que promedian los 60 años, han presentado cuadros derivados de hipertensión y asma crónica, consideraciones que los excluye de realizar una huelga seca, según indicó Cisternas.

Consultado sobre la veracidad de una nueva propuesta desde el movimiento en Rancagua, ciudad en la que comenzó la medida, Cisternas confirmó la información, indicando que no se referirá al tema para obedecer la orden a nivel nacional.

Conforme a lo trascendido, en la propuesta habría mediado el monseñor Alejandro Goic y el senador Juan Pablo Letelier.

Arturo Samit, vocero de los huelguistas instalados en el Consejo de la Cultura, recordó el petitorio inicial que busca igualar las pensiones Valech a la Rettig, explicando que esta última partió mal desde el comienzo con la valoración que el presidente de turno, realizó de lo experimentado por los ex presos políticos.

Las declaraciones fueron realizadas en el marco de la reunión sostenida por los huelguistas, ubicados en el Consejo de la Cultura con integrantes de la bancada del Partido Socialista.