Hace unas semanas y tras varias protestas, los habitantes de Rapa Nui lograron llegar a un pre acuerdo respecto a la ley de regulación para el territorio, lo que significa un importante avance -por ejemplo- en materia migratoria, en un territorio que ya ve mermada su capacidad. Sin embargo, en el caso de Juan Fernández, a pesar de que también se reconoce como territorio especial, aún no existen avances concretos respecto a los estatutos especiales que deben ser confeccionados para regular aspectos propios de los territorios apartados.

Desde el año 2006 que el Archipiélago Juan Fernández viene alzando la voz para que en el territorio se regule el tránsito de personas y la permanencia de ellas en la isla. El 2007 una reforma constitucional impulsada por Michelle Bachelet, en su primer periodo presidencial, le otorgó el carácter de territorio especial junto a Rapa Nui, sin embargo los estatutos especiales que deben regular esta condición aún no se concretan.

El alcalde Felipe Paredes explicó que uno de los aspectos que busca el trabajo conjunto que se esta realizando con el Gobierno es regular el tránsito por el territorio, lo que permitirá manejar de forma racional la cantidad de personas que lleguen al archipiélago.

Paredes dijo que esto, comparado con lo ocurrido en Rapa Nui, tiene diferencias sustanciales. Por ejemplo, Isla de Pascua es un terreno mas grande y solo el 30% corresponde al parque nacional administrado por Conaf. Mientras que en Juan Fernández el terreno disponible es comparativamente más pequeño y más del 98% corresponde al parque nacional, por lo tanto considerando que incluso en los últimos años se ha duplicado la población en Robinson Crusoe, la regulación se torna más urgente.

Las conversaciones con el Estado han avanzado y ya hay un borrador establecido del reglamento, no obstante hay algunas diferencias de opinión -por ejemplo- en si ese documento regularía sólo el tránsito a las islas o se tomaría una regulación en todo su conjunto.

El alcalde señala que se tiene confianza en que este 2015 ya exista algo más concreto ya que la zona urbana en materia de servicios básicos esta al tope.

Felipe Paredes indicó que al ritmo de crecimiento actual si no se regula el tránsito y la permanencia en la isla, en cinco años se podría llegar al límite máximo de capacidad para poder acoger a toda la población.

Desde el aspecto geopolítico administrativo, el proyecto de regulación que se está barajando avanza también a la descentralización e incluye una nueva figura administrativa. Una especie de Gobernación Provincial sin ser provincia, es decir una Gobernación sólo territorial, siguiendo el camino que otros territorios insulares han adoptado en el resto del mundo.

En este aspecto, el trabajo que se desarrolla se vislumbra a 40 o 50 años a futuro, para asegurar que el territorio insular se mantenga inalterable.