La Fiscalía Centro Norte investiga un posible tráfico de influencias al interior de la Universidad de Santiago en una licitación pública con la empresa española Isolux–Corsan y en donde aparece como gestionador el tío de Natalia Compagnon, Waldo Rojas Soto. La entidad universitaria salió al paso para desvincularse de todo nexo con el familiar de la nuera de la presidenta Michelle Bachelet.

El pasado 27 de abril, el Ministerio Público junto a la PDI allanaron las oficinas de la empresa ibérica emplazadas en calle La Concepción de la comuna de Providencia. La misma entidad perdió en un corto periodo y de forma abrupta cuatro de las siete licitaciones por irregularidades.

Uno de estos contratos involucró a la Universidad de Santiago para la construcción del edificio docente por un monto de más de $10.000 millones y donde ya se han gestionado pagos por más de $4.300 millones.

La investigación se inició luego del testimonio del ex director Administrativo y Finanzas de la Universidad, Mauricio Carrasco, quién fue despedido por irregularidades en el contrato con Isolux – Corsan. Pese a ello, el vinculo sigue vigente pero con acciones judiciales de por medio.

El secretario general de la Universidad de Santiago, Gustavo Robles, señaló que la rectoría desvinculó de inmediato a Carrasco tras detectarse la situación, junto con instruir un sumario.

En esa línea y consultado por el vínculo de Waldo Rojas Soto -ingeniero comercial de la Universidad de Chile y quien gestionó diversos contratos de la empresa en Chile, recibiendo pagos por sus trabajos-, Robles descarto “de forma enfática” alguna relación por parte de la casa universitaria.

El secretario seneral de la Universidad de Santiago confirmó que, por el retraso de las obras, la casa de estudios ha recuperado cerca de $3.200 millones desde los bancos Itau y Santander.

Además, se está llevando acciones judiciales por fraude al fisco y cohecho en el Sexto Juzgado de Garantía y posible colusión en la licitación pública, además de sumarios administrativos internos.

Desde la Fiscalía Centro Norte se informó que quien está a cargo del proceso judicial es el fiscal regional Andrés Montes, pero que no está realizando declaraciones a la prensa.

Junto a ello, Radio Bío Bío intentó contactarse con la empresa Isolux–Corsan, sin que ello fuera posible.