Los campeones defensores San Antonio Spurs no supieron aprovechar su ventaja de locales y cayeron este jueves en un tenso final 102-96 contra Los Angeles Clippers, que empataron a tres victorias por bando la serie de playoffs de la Conferencia Oeste de la NBA.

Los Spurs ahora marchan a la boca del lobo en Los Angeles, donde buscaran ganar a sus empecinados rivales si quieren avanzar a semifinales de Conferencia.

Los Clippers basaron su triunfo en sus estrellas Blake Griffin (26 puntos, 12 rebotes) y Chris Paul (19 cartones y 14 asistencias).

Los puntales de los Spurs, Tim Duncan y Kawhi Leonard, se quedaron 12 puntos per cápita, mientras el armador francés Tony Parker, limitado por una lesión en el tendón de Aquiles, anotó sólo ocho puntos.

El italiano Maarco Belinelli fue el mejor anotador de los Spurs con 23 tantos, seguido por el francés Boris Diaw con 17. El argentino Manu Ginóbili encestó sólo tres puntos, capturó un rebote y dio una asistencia en 14 minutos en la duela.

“Los Clippers fueron mejores que nosotros, estaban más concentrados y más físico que nosotros: Nuestra noche fue decepcionante para todo el grupo”, se lamentó Gregg Popovich, entrenador de los campeones.

Bulls sentencian su serie ante los Bucks y avanzan a semifinales del Este

En otro partido de la jornada, los Chicago Bulls se clasificaron a semifinales de la Conferencia Este al aplastar a los Milwaukee Bucks 120-66, la mayor paliza en la historia de los playoffs de la NBA.

La victoria de los Bulls fue la de mayor margen desde que Minnesota venció a San Luis 133-75 el 19 de marzo de 1956.

Los Bulls ganaron la serie de primera ronda cuatro victorias a dos y ahora avanzan a un duro tope al mejor de siete partidos contra los Cleveland Cavaliers, que se clasificaron antes al barrer 4-0 su duelo con Boston Celtics.

Mike Dunleavy lidero a los Bulls con 20 puntos, seguido de Pau Gasol, 19 cartones, Derrick Rose con 15 y el francés Joakim Noah con 11 tantos y 10 rebotes.

Los Bulls se beneficiaron de la exclusión del segundo período del prodigio griego Giannis Antetokounmpo, quien había desestabilizado por completo el equipo dirigido por Jason Kidd.

Antetokounmpo fue expulsado faltando dos minutos para el descanso por una falta flagrante sobre Dunleavy, cuando éste intentaba un triple.

Pese a lo disparejo del marcador, el partido fue en extremo físico, pues los Bucks volcaron en la cancha su impotencia, cometiendo numerosas faltas duras.