El ejército sirio bombardeó este domingo la ciudad estratégica de Jisr al Chughur, en la provincia occidental de Idleb, un día después de que la tomaran combatientes de Al Qaida y rebeldes islamistas, indicó una ONG.

La aviación de Damasco atacó al menos cuatro veces esa ciudad del noroeste del país, ubicada cerca de la frontera turca y las regiones de Latakia (oeste) y Hama (centro), ambas bajo control del régimen de Bashar al Asad, según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).

La ONG no pudo dar ningún balance de víctimas de los ataques, aunque indicó que al menos 27 personas murieron en combates el sábado.

Combatientes del Frente al Nusra –rama siria del grupo extremista sunita Al Qaida– tomaron el sábado, con la ayuda de grupos rebeldes islamistas, el control de esa ciudad, tras haber conquistado Idleb, la capital de la provincia homónima, hace menos de un mes.

Una fuente militar siria, citada por la agencia oficial Sana, aseguró que “unidades del ejército se habían desplegado en torno a Jisr al Chughur para evitar bajas entre la población civil”.

En la noche del sábado, esas tropas “atacaron posiciones militares conquistadas los rebeldes alrededor de la ciudad”, añadió Sana.

Los combates proseguían este domingo al sur de la ciudad, en la que vivían cerca de 45.000 personas antes del inicio de la guerra civil siria en 2011, indicó el director del OSDH, Rami Abdel Rahman.

Sana señaló, además, que “los grupos terroristas” cometieron “una horrible masacre de más de 30 civiles, incluidos mujeres y niños (…) tras haber entrado en Jisr al Chughur”. Una información que el OSDH no pudo corroborar.