Una coalición de grupos rebeldes islamistas con la rama siria de Al Qaeda avanzaba hacia la ciudad de Jisr al Shughur, uno de los últimos bastiones del régimen de Bashar al Asad en la provincia de Idleb (noroeste), según una ONG.

Esta localidad es estratégica ya que está cerca de la frontera con Turquía. Esta coalición que efectúa el ataque desde el jueves, se hace llamar Ejército de la Conquista y ya ocupó a fines de marzo Idleb, la segunda capital provincial que perdió el régimen en cuatro años de conflicto.

El frente Al Nosra, rama de Al Qaeda en Siria, lanzó el asalto enviando al menos 15 kamikazes con cinturones de explosivos a Jisr al Shughur y cometió una serie de atentados suicida en torno a la ciudad, según Rami Abdel Rahman, director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), con sede en Gran Bretaña.

Si la ciudad de Jisr Al Shugur cayera, los rebeldes podrían lanzar una ofensiva contra Latakia, un feudo de Asad, lo que “sería muy peligroso para el régimen”, según Charles Lister, investigador del Brooking Doha Center.

Más de 220.000 personas han muerto desde el comienzo del conflicto en Siria, en marzo de 2011, iniciado con manifestaciones pacíficas contra el poder, y convertido ahora en una guerra civil.