¿Has observado a tu gato abrir el hocico cada vez que huele algo que le llama la atención? Es un gesto que resulta gracioso, es casi automático y tiene una explicación científica muy sencilla.

Los felinos cuentan con la particularidad de mezclar su sentido del olfato y el gusto a través del órgano de Jacobson (u vomeronasal). Con esta estructura cuenta un gran número de especies, que incluye al hombre, pero en el gato aúna estos dos sentidos fundamentales, el olfato y el gusto.

Éste se encuentra localizado en la parte inferior del tabique nasal y rodeada por una cápsula osteocartilaginosa, siendo estimulado cuando perciben moléculas específicas como las hormonas de una gata en celo o la orina de otro gato.

Los olores son retenidos por los receptores de la lengua, que luego se dirigen hacia la abertura del órgano de Jacobson cuando el felino oprime la lengua con su paladar.

El órgano se comunica con la cavidad bucal a través del conducto nasopalatino. Los axones de las neuronas receptoras del órgano vomeronasal terminan en una estructura del sistema nervioso central denominado bulbo vomeronasal o bulbo olfatorio accesorio, según la Asociación Argentina de Medicina Felina.

Las partes del cerebro que se ocupan de interpretar la información que viene desde esta estructura se ubican en las áreas preóptica y medial del hipotálamo, razón por la que están relacionadas a los diferentes comportamientos como sociales, alimentarios, defensa y sexuales.

Los gatos usan este acto reflejo para succionar el aire y atraer las partículas hacia su órgano vomeronasal, lo que es conocido como reflejo de Flehmen (que en alemán significa “arrugar el labio superior” ).

El aire no atraviesa esta pequeña parte del animal si no se realiza el reflejo, es decir, el hocico parcialmente abierto, los labios hacia abajo y la nariz arrugada. Esto hace que el felino cierre la ruta respiratoria normal y provoca que el aire circule hacia los incisivos.

Cuando veas que tu gato esté olfateando de esta manera, es decir, abriendo el hocico por un tiempo prolongado, lo más probable es que esté percibiendo feromonas, ya que según la revista Royal Canin, es la principal función del órgano de Jacobson en felinos.

Esta característica es muy fundamental en los felinos porque cuando las vías respiratorias están obstruidas o atrofiadas por alguna infección, o porque simplemente con el paso del tiempo el sentido del olfato suele perderse, el animal tiene pérdida del apetito, mientras que la conducta sexual, el marcaje territorial y la cacería son alterados también.

El reflejo descrito resulta más frecuente en los machos que en las hembras, y podrían comenzar a mostrarlo a las 6 semanas de vida.