Los partidos islámicos indonesios presentaron una propuesta de ley para la prohibición de la venta y el consumo de alcohol, que prevé penas de cárcel en caso de incumplimiento según anunciaron este martes varios parlamentarios.

El texto que examina el parlamento prevé la prohibición de la venta, consumo, producción y distribución de bebidas con más de un 1% de alcohol.

“El consumo de alcohol aumenta, en particular entre los jóvenes, y amenaza su futuro porque provoca adicción y puede dañar la salud”, alegó el diputado Muhamad Arwani Thomafi, del Partido Unificado del Desarrollo, uno de los defensores de esta normativa legal.

Los consumidores clandestinos podrían ser sancionados con penas de hasta dos años de cárcel y los traficantes se expondrían a hasta 10 años de reclusión.

Las autoridades podrían expedir autorizaciones con motivo de fiestas religiosas y algunos lugares turísticos como la isla de Bali, muy frecuentada por australianos, quedarían exentos.

En el pasado, los partidos islámicos indonesios intentaron, en vano, prohibir la venta y consumo de alcohol en este país de mayoría musulmana.

Por de pronto, la entrada en vigor el jueves de una normativa prohibirá la venta de alcohol en tiendas pequeñas, pero no afecta a supermercados, bares y restaurantes.

La mayoría de los 250 millones de indonesios practica un islam moderado y no consume alcohol.