El ministro de Hacienda, Alberto Arenas, respaldó al mundo empresarial, cuyo desprestigio ha aumentado luego de los últimos escándalos que vinculan el dinero con la política, como los casos Penta, SQM o Caval.

En la Cuenta Pública de su cartera, Arenas sostuvo que los recientes episodios de “delitos tributarios y formas cuestionables de financiamiento político” deben ser resueltos por las instituciones pertinentes.

También que todos los actores, incluido el Gobierno, deben buscar la forma de capitalizar estos hechos, que, a su juicio, “son una oportunidad para fortalecer las instituciones, transparentar los mercados y la relación política-negocios”.

El ministro de Hacienda defendió el papel del sector privado y entregó una nueva señal a los empresarios: aseguró que el Ejecutivo no demolerá las bases del actual sistema neoliberal.

Las palabras del ministro Arenas fueron bien recibidas por el empresariado. El presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Ricardo Mewes, destacó el llamado a confiar en las instituciones y en el mundo privado.

Mewes expresó que los dirigentes empresariales “no han caricaturizado” el programa de Gobierno y planteó dudas sobre el compromiso de mantener las bases del actual modelo económico.

El ministro Alberto Arenas insistió en que la expansión del Producto Interno Bruto, durante este año, debería ser “al menos” un punto mayor al 1,9 por ciento de 2014, no descartando un crecimiento cercano o levemente superior al 3 por ciento, lo que dependería de las condiciones internas y externas.

Como parte del proceso de fortalecimiento de la actual institucionalidad, el Ministerio de Hacienda enviará, durante este año, los proyectos para robustecer la Superintendencia de Valores y Seguros, la Ley General de Bancos y el sistema de Alta Dirección Pública.

También durante este 2015, el Gobierno presentará una propuesta para una nueva ley de responsabilidad fiscal.