Un atentado suicida mató este jueves a por lo menos 13 personas e hirió a otras decenas durante una manifestación en una provincia del este de Afganistán, fronteriza con Pakistán, informaron las autoridades locales.

El atentado se produjo en la ciudad de Jost, capital de la provincia homónima, cuando miles de manifestantes se dirigían a la residencia del gobernador provincial Abdul Jabar Naeemi, al que acusan de corrupción, constató la AFP.

“Hemos recibido 13 muertos y 39 heridos”, declaró a la AFP Aminula Khan, un médico del hospital público de Jost.

Mientras tanto un responsable policial que pidió conservar el anonimato dio cuenta de 20 muertos en este atentado que aún no ha sido reivindicado.

La provincia de Jost es un bastión de la red Haqani, un brazo de los talibanes afganos que no suele reivindicar los atentados contra civiles. Su blanco suelen ser las fuerzas de seguridad afganas.

Por otro lado, el jefe de la policía del distrito de Greshk, en la provincia de Helmand, un bastión talibán en el sur del país, perdió la vida el miércoles por la noche por la explosión de una bomba al paso de su vehículo, informaron el jueves fuentes de seguridad locales.

Según un informe de la ONU publicado en febrero, el conflicto afgano causó numerosas víctimas civiles en 2014, con casi 3.700 muertos y 6.850 heridos, un aumento de 22% en un año.