Una solicitud ante el Primer Juzgado de Letras de Santiago interpuso el ingeniero Sergio Bustos, con el objetivo de que se prohíba a Caval vender los dos automóviles Lexus que aún mantiene la empresa como propiedad.

Lo anterior surge en respuesta a la incautación por parte de la Fiscalía de Rancagua de un cheque pagado por Silca a Caval por $2.000 millones, en el marco de las operaciones que desarrolla el Ministerio Público en torno a determinar si existieron irregularidades en la polémica compra venta predios en Machalí.

Según publicó La Tercera, en la argumentación de Bustos (quien inició un juicio laboral en contra de quienes argumenta que fueron sus empleadores) detalla que la incautación podría generar problemas de liquidez a la sociedad que pertenece en un 50% a Natalia Compagnon, esposa de Sebastián Dávalos Bachelet.

Bustos consigna que en septiembre de 2014 Caval vendió dos Lexus, temiendo que la retención del cheque implique la venta de los otros dos automóviles registrados bajo las patentes FBCY20-6 y FBCY41-9.

La demanda de Sergio Bustos, cuyo juicio se iniciará el lunes 6 de abril, establece que sobre $195 millones le son adeudados por parte de la sociedad. El ingeniero fue quien propició la obtención del crédito por $6.500 millones para la compra del terreno, los que se lograron tras la reunión de Natalia Compagnon y Sebastián Dávalos con Andrónico Luksic, vicepresidente del Banco de Chile.