Una asociación ambientalista demandó este lunes a la vicepresidenta de Guatemala, Roxana Baldetti, por un polémico y millonario contrato con una empresa de Israel para descontaminar el Lago de Amatitlán, informó la organización.
El director del área penal del Centro de Acción Legal Ambiental y Social de Guatemala (Calas), Rafael Maldonado, dijo a periodistas que presentó la acción ante los tribunales para que la Fiscalía investigue si Baldetti incurrió en anomalías en el contrato.
Maldonado afirmó que no se realizó un estudio de impacto ambiental antes de firmar el contrato por 18 millones de dólares con la firma israelí Tartic Engineering para “rehabilitar y manejar la calidad del agua” del lago de Amatitlán, unos 25 km al sur de la capital guatemalteca, que sufre graves problemas de contaminación.
Explicó que el cuestionamiento a la vicepresidenta se debe a que recomendó la contratación de la empresa israelí, que se ha negado a presentar las acciones que ejecutará, por lo que ambientalistas, opositores y científicos han pedido revocar el acuerdo.
Los especialistas cuestionan a la firma por su inexperiencia y porque en su criterio no ataca de fondo la contaminación del lago, que podría convertirse en un pantano.
Ante las críticas, la vicepresidenta anunció este lunes la suspensión de los trabajosde limpieza mientras se conforma una comisión técnica para evaluar las acciones de descontaminación del lago.
“Estamos interesados en escuchar la opinión de científicos nacionales e internacionales para que analicen cada una de las propuestas que ellos (la empresa) tienen”, afirmó Baldetti, tras indicar que después de esas reuniones se determinará si se cancela o no el contrato.
El Lago de Amatitlán es uno de los mantos de agua dulce más importantes del país, pero en los últimos 20 años ha sufrido contaminación debido a la desembocadura de aguas negras y de desechos de las industrias de la capital.
