La UEFA está a la espera de recibir los informes del árbitro y de su delegado desplazado al Montenegro-Serbia, partido que fue suspendido el viernes por actos violentos, antes de decidir eventuales sanciones, informó una fuente de la instancia europea.

El lunes, la UEFA precisará en qué fecha estudiará los incidentes ocurridos en Podgorica.

El partido valedero para la clasificación para la Eurocopa-2016 fue suspendido una primera vez y durante de más de media hora después de que el arquero ruso Igor Afinkeev fuese alcanzado por una bengala y tuviese que ser hospitalizado como medida de precaución

El árbitro alemán Deniz Aytekin decidió suspender definitivamente el encuentro en el minuto 67, con 0-0 en el marcador, al estimar que la seguridad no estaba garantizada, después de un enfrentamiento entre jugadores de ambos países y el lanzamiento de objetos desde la grada.

Estos nuevos incidentes llegaron después de un penal muy protestado concedido a favor de Rusia y lanzado por Roman Shirokov. El arquero local lo detuvo.

Un territorio de la extinta Yugoslavia vuelve a protagonizar la jornada europea de fútbol por incidentes violentos.

El pasado 14 de octubre, en Belgrado y también en las eliminatorias para la Eurocopa, el partido se suspendió por enfrentamientos entre los jugadores y en las gradas después de que un futbolista serbio atrapase un dron que sobrevolaba el estadio del estadio del Partizán con una bandera que rezaba “Gran Albania”, un proyecto nacionalista que aspira a juntar las comunidades albanesas de los Balcanes en un mismo Estado.

Tras aquellos incidentes, la UEFA decretó una victoria de Serbia por 3-0, pero sin otorgar los puntos correspondientes por ese triunfo. Ambas Federaciones fueron castigadas además con multas de 100.000 euros, que recurrieron al Tribunal Arbitral del Deporte (TAS).

Los incidentes del viernes en Pogdorica se producen en momentos en los que el presidente de la UEFA, Michel Platini, ha endurecido el tono ante una aumento de la violencia y el hooliganismo en el Viejo Continente.

“Desde hace mucho tiempo no habíamos tenido que hacer frente a un aumento de los nacionalismos y los extremos en Europa”, declaró Platini el martes en el discurso pronunciado en el congreso de la UEFA, en el que fue reelegido como presidente.

“Esta tendencia insidiosa, vuelve a los estadios porque el fútbol es un reflejo de la sociedad. Nuestro deporte, por su popularidad, es un barómetro de los males de nuestro continente. Y, este barómetro muestra cifras alarmantes”, advirtió.