La crisis por la que atraviesa la política chilena es profunda y está lejos de ver la luz al final del túnel. Es que el caso Penta, su arista SQM y la compra de terrenos realizada por la empresa Caval han minado de forma importante la credibilidad de nuestros representantes.

Bajo este contexto, el diputado y presidente del Partido Socialista, Osvaldo Andrade, estuvo en La Entrevista de Tomás Mosciatti en CNN Chile, donde analizó la situación actual de la política local.

Por ejemplo, el legislador indicó que por el caso SQM, que involucraría a políticos de la Nueva Mayoría, “he visto mucha gente nerviosa. He cometido la torpeza de señalar que de pronto se situó una extraña epidemia de colitis (…) Uno no puede tener un doble estándar en esto, por eso uno tiene que respaldar las investigaciones”.

Andrade también tuvo palabras para la labor del Servicio de Impuestos Internos (SII), fuertemente cuestionada tras la demora en presentar una querella para investigar ampliamente a Soquimich por delitos tributarios. “Si hay dudas sobre las instituciones, hay que disiparlas“, dijo, para luego agregar que “yo creo que en estos casos siempre hay que actuar con mayor celo”.

Luego, el timonel del PS profundizó su análisis sobre la política y declaró que “yo creo que esta es una crisis severa, y ojo, puede ser terminal si no lo hacemos bien. (Puede significar) que el sistema político simplemente colapse. No es casual que las instituciones, entre ellas la más relevante del país, que es la Presidencia de la República, tenga el grado de desafección que hoy tiene“.

“Lo más grave que ha sucedido es el caso Caval, al margen de la arista judicial. Lo que pasa es que obra dos cuestiones centrales: la impronta del gobierno y la cúspide estratégica. Es intolerable lo que pasó ayer (lunes), respecto de la consuegra (de Michelle Bachelet, madre de Natalia Compagnon y su sueldo en la Junji), porque tiene una buena explicación. Incluso es tan razonable que todos los podemos aceptar. Lo que no es posible, es que se reedite el caso Caval desde la imprevisión. Cuando suceden estas cosas, hay que ocuparse muy gruesamente, porque es una crisis severa“, añadió.

Andrade reclamó “una sintonía más fina entre el gobierno y su coalición“, cosa que sí ocurría el año pasado según dio a entender.

Mosciatti le consultó al diputado sobre sus dichos realizados el 2011, cuando el ex presidente Sebastián Piñera tenía una aprobación de un 35%. En ese momento dijo “le quiero hacer un llamado al gobierno, y particularmente a la Alianza por Chile, a que se hagan cargo de este problema. No es bueno para Chile. Chile no merece un gobierno que sistemáticamente, en todas las mediciones, sigue bajando en aquellos aspectos que son centrales para cualquier República: la credibilidad y la confianza del Presidente (…) Chile no merece un Presidente con este nivel de desaprobación“.

Requerido por el nivel de aprobación que Michelle Bachelet tiene ahora, muy parecido al de su antecesor, Andrade aseveró que no le ha dicho algo sobre el tema a la mandataria “porque no he podido conversar con ella”, pero que “uno no cambia de opinión dependiendo de quién esté ejerciendo (…) Lo mismo digo ahora“.

Lo que tenemos que hacer es hacernos cargo del problema“, argumentó, por lo que es necesario obtener la “verdad caiga quien caiga, todos tenemos que estar dispuestos a enfrentar el problema (…) Cuando uno dice que se sepa la verdad y caiga quien caiga, uno tiene que hacerse cargo de lo que dice”, añadió.

Luego, retomó su punto sobre el caso que envuelve a Sebastián Dávalos y dijo que “el efecto Caval para la política ya llegó, qué más podría pasar, que alguien cayera preso (…) Si se empeorase el caso Caval, el efecto que produjo en el sistema político ya está, por eso me parece desafortunado lo de la consuegra, porque es la reedición del mismo tema desde un hecho que es posible de prever y explicar“.

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