El nuevo Canal de Panamá podrá iniciar operaciones comerciales en abril del próximo año si el consorcio que realiza los trabajos cumple las proyecciones de concluir la obra a comienzos de 2016, aseguró el administrador de la ruta, Jorge Quijano.

“Cumpliendo con lo que indica (Giuseppe) Quarta en cuanto al avance programado de la obra podríamos empezar a operar comercialmente en abril la ampliación del Canal”, dijo Quijano a la AFP.

Quarta había asegurado horas antes que GUPC, el principal contratista de las obras de ampliación, iniciará las pruebas de la nueva ruta en junio de este año para finalizar los trabajos en enero de 2016.

“Estamos bien confiados en que a comienzos del año que viene todo estará concluido para que los barcos puedan empezar a pasar”, dijo Quarta en un encuentro con corresponsales de prensa.

Desde 2007 el Canal de Panamá se encuentra en fase de expansión para que buques de hasta 14.000 contenedores, el triple de su capacidad actual, puedan atravesar sus 80 kilómetros.

Las obras, estimadas en 5.250 millones de dólares, llevan un año de retraso debido a diversas disputas entre la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) y GUPC, además de varias huelgas de trabajadores.

Según Quarta, a principios de mayo finalizará la instalación de las 16 compuertas de las nuevas esclusas, que daran paso a los trabajos de electromecánica para empezar el llenado progresivo en junio.

Posteriormente se harán pruebas del funcionamiento de las esclusas durante unos siete meses para entregar la obra en enero si no hay inconvenientes.

“Las incertidumbres hacen parte de un proyecto como este”, pero “en este momento no se vislumbra un escenario” que impida completar los plazos previstos, dijo Quarta.

Una vez que GUPC -integrado por la española Sacyr, la italiana Salini Impregilio, la belga Jan de Nul y la panameña Constructora Urbana- entregue la obra, se iniciarán las pruebas con barcos.

GUPC, que ejecuta el mayor contrato de la ampliación -el diseño y construcción de las nuevas esclusas-, mantiene disputas millonarias con la ACP por posibles sobrecostos en los trabajos, lo que le llevó a detener la ampliación por 15 días en 2014.

Quijano reconoció semanas atrás que las obras de ampliación costarán más de lo previsto debido a los 17 reclamos de GUPC por sobrecostos por un total de 2.390 millones de dólares sobre el contrato original de 3.200 millones.

El costo real del proyecto no se conocerá hasta años después de inaugurarse la vía, debido a los diferentes reclamos y disputas.

Por el Canal panameño, cuyos principales usuarios son Estados Unidos y China, pasa el 5% del comercio marítimo mundial.