La Casa Blanca reafirmó este miércoles su apoyo a una solución de dos Estados al día siguiente de la victoria en las elecciones legislativas israelíes de Benjamín Netanyahu, quien enterró hace pocos días la idea de un Estado palestino.

“El presidente sigue pensando que una solución de dos Estados es la mejor manera de responder a las tensiones”, declaró su portavoz, Josh Earnst.

El presidente Barack Obama no llamó aún a Netanyahu, pero lo hará “en los próximos días”, afirmó Earnest, quien precisó que el secretario de Estado, John Kerry, sí había felicitado al primer ministro israelí.

El portavoz explicó que durante las dos elecciones israelíes precedentes, Obama recién llamó al primer ministro Netanyahu después de formarse gobierno.

Las relaciones entre Obama y Netanyahu, notoriamente tensas, se agravaron más con el viaje a Washington del primer ministro israelí por invitación de los republicanos del Congreso, donde pronunció un discurso en el que atacó con virulencia las negociaciones sobre el programa nuclear iraní.

El ejecutivo estadounidense expresó, por otro lado, su preocupación por algunos discursos de la reciente campaña electoral israelí” que dividen”, en clara referencia a las palabras de Netanyahu y su partido sobre el voto de los árabes.

El día de la votación, el primer ministro israelí colgó un video alarmista en su página de Facebook: “El poder de la derecha está en peligro. Los electores árabes van en masa a las oficinas de votación”, señaló.

“Estados Unidos está muy preocupado por los discursos que dividen y buscan marginar a los ciudadanos árabes israelíes”, destacó el portavoz de Obama. “Esto debilita los valores y los ideales democráticos, que son una parte importante de lo que une a Estados Unidos e Israel”, agregó.