Haciendo uso del carro lanza agua, comúnmente empleado para disuadir manifestaciones, personal de Carabineros colaboró en la tarea de contener las llamas que azotan al sector alto de Valparaíso.

Toda ayuda fue y sigue siendo bien recibida, ya que el violento incendio, que amenazó a sectores habitados, aún no se encuentra controlado.

Según el último balance, el siniestro ha dejado más de 30 lesionados, una persona muerta y cerca de 500 hectáreas de terreno consumidas.