Frente al dictamen emitido por la Contraloría, que obliga a la Municipalidad de Concepción a alejar de sus funciones a sus delegado municipal por Barrio Norte, su alcalde Álvaro Ortiz, declara estar en absoluto desacuerdo con esta orden que por ley debe acatar.

El Municipio de Concepción fue notificado este jueves de la orden de la Contraloria General, que lo obliga a poner término a la designación del delegado municipal de la oficina de Barrio Norte, Sergio Muñoz.

Investigación solicitada por el Concejal Joaquín Eguiluz, con respecto a la legalidad de la contratación y el monto de las remuneraciones de Muñoz, como asesor del área de desarrollo comunitario hasta el 31 de diciembre de 2014.

El dictamen indicó además de que con “posterioridad a la fecha en que fue designado delegado municipal, fue contratado con el fin de prestar servicios a honorarios durante el periodo que va desde el 1 de enero hasta el 31 de diciembre, de los años 2014 y 2015 (…) encontrándose impedido, para seguir desarrollando la primera labor mencionada”.

Es por esta razón, que el ente fiscalizador ordenó al municipio alejar de sus funciones a Muñoz en un plazo de 5 días.

El alcalde Álvaro Ortiz, enfatizó que está en absoluto desacuerdo con el dictamen de la Contraloría, que lo respeta por supuesto, pero que van a responder dentro de los plazos estipulados

Cabe señalar que este tipo de órdenes de la Contraloría General se acatan, es decir, son inapelables.

Sergio Muñoz, contratado como asesor de Dideco y Delegado Municipal es hermano de Eduardo Muñoz, consejero regional (CORE) y Presidente de la instancia, quien está casado con la hija del Gobernador de Arauco, Humberto Toro. Además, es padre de Karla Muñoz, secretaria del alcalde Álvaro Ortiz.

Eguiluz agregó que es evidente la importante participación de la familia Muñoz en la administración de la Municipalidad, incluso llegando a entregar cargos para los cuales no están calificados, hecho que le parece poco ético.