Reacciones inmediatas tuvo el envío de invitaciones a la ceremonia de investidura de Juan Barros como obispo de Osorno. Hay quienes se han negado a asistir a la actividad, mientras que otras personas han iniciado manifestaciones desde este miércoles y hasta que se concrete su nominación.
El nombramiento de Juan Barros está prácticamente confirmado, luego que se conociera que su consagración se realizará sí o sí, al menos según da cuenta el protocolo. Esta situación fue criticada por los diputados Fidel Espinoza y Sergio Ojeda, quienes se refirieron a la obstinación de la estructura jerárquica de la Iglesia Católica con la nominación de Barros.
Espinoza anunció que, si bien asistirá a la ceremonia, probablemente no ingrese y esté junto a aquellos que se manifestarán tal día. Por su parte, el demócrata cristiano fue más duro en sus críticas, asegurando que el Vaticano no ha escuchando a los habitantes de Osorno, confirmado que no asistirá a la ceremonia de investidura de Juan Barros.
Desde el grupo de concejales osorninos que se ha opuesto a la nominación de Barros, Carlos Vargas endureció sus dichos hacia la pronta primera autoridad católica en la zona, tildándolo de oscuro, pues sólo ha mostrado silencio frente a las acusaciones que versan sobre su persona como encubridor de los abusos de Fernando Karadima.
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De acuerdo al edil, la actitud tozuda de Barros de no renunciar tendría directa relación con que quiere seguir en en aquel poder en el que siempre ha estado, desde donde ha recibido sueldos millonarios, como cuando fue obispo castrense.
Todo ello continuaría al llegar a Osorno, una plaza de la iglesia poderosa económicamente.
Juan Carlos Claret, vocero del movimiento OLA de los laicos organizados, se mantuvo cauto ante el envío de las invitaciones, sobre todo por la desprolijidad de las mismas, que no muestran firma ni timbre de quién convoca, dando cuenta que podría ser una maniobra de adelantamiento de la propia diócesis local ante la nebulosa existente aún, pues no se conoce respuesta formal del papa Francisco.
Por todo es que afirmó que la esperanza de la revocación del nombramiento de Barros aún no se pierde, pues pese a todo lo dicho, el obispo Fernando Chomalí aún no regresa a Chile desde el Vaticano a entregar la respuesta del papa.
En tanto, para este miércoles se ha convocado a una manifestación en las afueras de la catedral de Osorno, actividad que podría tener una réplica en Santiago, pues un grupo encabezado por Juan Carlos Claret se encuentra en la capital entregado documentación en la nunciatura chilena, continuando la presión hacia la revocación de Barros como obispo de Osorno.
Dennys Salazar (RBB)
