El fabricante italiano Pirelli suministrará los nuevos neumáticos “medios” y “blandos” a las diez escuderías que participarán este fin de semana en el Gran Premio de Australia, primera carrera del campeonato de Fórmula 1 2015.

En el circuito de Albert Park, Pirelli prevé que los nuevos monoplazas de 2015 sean más rápidos, unos dos segundos de media, que los coches de 2014. También habrá un segundo de diferencia por vuelta entre los neumáticos medios (pintado de blanco) y los neumáticos blandos (pintados de amarillo).

Según Paul Hembery, el director de Pirelli Motorsport, el Gran Premio de Australia es “uno de los más emocionantes del año porque marca el punto de partida de una nueva temporada en una pista exigente, popular y muy imprevisible”. Añade que “las gomas blandas y medias ofrecen aquí muchas variantes en su utilización”.

Además, los nuevos neumáticos de 2015 tienen una “nueva estructura” que garantiza una “mejor tracción” que permite a los pilotos “dar gas antes” (la aceleración a la salida de las curvas), lo que explica la mejora de las actuaciones de los equipos observada durante los entrenos invernales.

En Australia, la pista semipermanente de Albert Park es conocida por su bajo nivel de adherencia, algo que va mejorando con el paso del fin de semana por los residuos de goma que van quedando.

Pirelli desarrolló para la temporada cuatro tipo de neumáticos para pista seca: duros, medios, balndos y superblandos. Solo se permite dos tipos de neumáticos durante cada GP, además de las gomas intermedias y de lluvia.