En la Reserva Nacional El Yali, investigadores de la PUCV y UPLA encontraron poblaciones de Suaeda foliosa, especie usada como forrajera en Bolivia y que habita sectores semiáridos y costeros del norte de Chile, de la cual no se tenía registro en la zona.

En esta área silvestre protegida, administrada por la Corporación Nacional Forestal (CONAF), docentes descubrieron ejemplares de esta planta nativa que hasta ahora no había sido registrada dentro de los ecosistemas de la Región de Valparaíso.

Se trata de una especie de gran importancia para la alimentación del ganado en Bolivia, donde habita en las planicies salinas situadas en márgenes y playas de los salares, y en las llanuras aluviales de los ríos del altiplano seco y semiárido.

También crece en forma natural desde el norte de Lima (Perú) hasta la Región de Coquimbo (Chile), por lo que este hallazgo traslada su presencia en 300 km al sur.

“No tenemos certeza de cómo estos ejemplares llegaron a la zona. Sus semillas pueden haber sido transportadas por aves o personas, pero el hallazgo es importante porque demuestra que esta especie encontró en la Región de Valparaíso las condiciones para vivir y desarrollarse, lo que puede interpretarse como una secuela del cambio climático contemporáneo”, explicó el doctor Manuel Contreras.

Por su parte, el director regional de CONAF, Héctor Correa, manifestó que “este descubrimiento revela la trascendencia de la Reserva Nacional El Yali como laboratorio natural”.

En esa línea, agregó que “este entorno tan relevante para la investigación científica debe ser protegido con especial énfasis, ya que se ha visto severamente afectado por el tsunami del año 2010, la sequía que arrastra hace más de siete años la zona central del país, y diversas presiones antrópicas que amenazan su sustentabilidad en el tiempo”.

Cabe consignar que el hallazgo se efectuó tras la ejecución de un inventario florístico realizado entre los meses de mayo y agosto del año 2014, en el marco de un proyecto de restauración ecológica del humedal, financiado por la Agencia de Parques de Canadá y la Secretaría Regional Ministerial de Medio Ambiente, y desarrollado por la Universidad de Playa Ancha (UPLA).

Este registro fue publicado recientemente por Flores y Contreras, en la prestigiosa “Revista Chilena de Historia Natural”.