Como complejo calificó el panorama hídrico en los altos valles de Calingasta el intendente de ese departamento, Robert Garcés. Esto llevaría a que las autoridades transandinas evaluarían en la próxima veranada de crianceros chilenos a territorio argentino, la cantidad de cabezas de ganado que debería traspasar la cordillera chilena.

El planteamiento lo efectuó al término de una reunión protocolar que tuvo la intendenta de la región de Coquimbo, Hanne Utreras, con el gobernador de la provincia de San Juan, José Luis Gioja.

“Era lo que veníamos pidiendo en los comités de integración y también dirimir el tema de la fiebre aftosa. La región de Coquimbo estaba libre de esta fiebre sin vacunación y nosotros libres, pero con vacunación y eso había que dirimirlo ante un organismo internacional. Y también se necesitaba la intervención de los gobiernos para instruir al Sag de Chile y al Senasa de Argentina de hacer una presentación que dirimiera, por suerte tuvimos el certificado que nos deja tranquilos a ambos países y que nos permite que los caprinos de Chile puedan ingresar a los altos valles de Calingasta”, explicó Garcés.

Aseguró que cuando desarrollaron el cruce de San Martín durante esta temporada, “hemos visto muchos crianceros. Pero, también hay un tema que debemos analizar y tiene que ver que la falta de precipitaciones hace que tengamos menos pasturas“.

“Estamos pasando por una situación media caótica (falta de lluvias y nieve) en estos últimos cuatro años y tenemos que analizar con los organismos competentes, en este caso es el Inta, quien tendrá que decirnos qué cantidad de animales podrán ingresar, porque en esto tenemos que ser responsables ambas partes. Los dueños de los caprinos y nosotros desde este lado como departamento de Argentina, porque si hacemos depredación vamos a matar la gallina de los huevos de oro, tenemos que ser medidos”, reiteró Garcés.

La autoridad argentina admitió que no tenían tranques luego de que estos estaban en otra zona de San Juan, “pero eso no nos favorece en nada, porque nosotros estamos sobre los 1.600 metros de Altura.

Dijo estar claro que por la enorme cantidad de kilómetros que separan los altos valles de los crianceros argentinos, “ese territorio debe ser aprovechado por los chilenos con el acuerdo que hicimos, pero eso no quita que no debemos ser responsables con la cantidad de animales de ganado caprino, pero también viene con el ganado vacuno y mular”.

“Lo que vamos a hacer es un análisis profundo de la situación para que en la veranada próxima que parte el 15 de noviembre (2015), si tenemos precipitaciones de nieve y que nos favorezca a la provincia de San Juan y a los chilenos, de tal manera que tengamos pasturas, porque también poseemos problemas de escasez de agua de riego en los altos valles”, afirmó.

En las veranadas del sector cordillerano del departamento de Calingasta sólo el 2014 llegaron 72.456 animales de ganado menor y 2.960 animales de ganado mayor.

La gran mayoría del ganado proviene de la provincia de Limarí y otro porcentaje importante de Choapa. Esto ha permitido enfrentar la dura sequía que ha enfrentado ala región de Coquimbo, que en todo caso también está afectando al Valle de Calingasta.