Luego de que se conocieran las declaraciones del alcalde de la comuna de Machalí, José Miguel Urrutia (UDI), quien tras una serie de indagatorias en el marco del caso Caval, dijo que se encontraron con “la desagradable sorpresa” de que existieron irregularidades en la venta de los cuestionados terrenos.

Respecto a las recientes acusaciones, el vocero de Gobierno, Álvaro Elizalde, aseveró que desconoce los nuevos antecedentes, sin embargo indicó que el caso debe ser investigado por las instituciones correspondientes, por lo que dejó en manos de la Fiscalía la realización de las diligencias necesarias para esclarecer el hecho que involucra al hijo de la presidenta Bachelet.

Elizalde precisó que lo importante ahora es que el municipio de Machalí ponga todos los antecedentes a disposición del Ministerio Público.

Recordemos que José Miguel Urrutia aseguró que entregó antecedentes al Ministerio Público de Rancagua, respecto a la adquisición de los terrenos en Machalí por parte de la empresa Caval, que pertenece en un 50% a Natalia Compagnon, esposa de Dávalos.

Urrutia especificó que se entregaron correos electrónicos entre personeros del Departamento de Obras del municipio con funcionarios del Ministerio de Vivienda, para verificar si existió el ilícito de tráfico de influencias.

Por otra parte, el vocero de Gobierno, evitó indicar si consideran que existió algún tipo de intencionalidad política detrás de la acusación en la orden del sumario encargado por el alcalde de Machalí a fin de investigar la presunta participación de funcionarios municipales en la polémica venta de los terrenos.

En ese plano agregó que no corresponde juzgar en absoluto bajo esa lógica las declaraciones del alcalde y enfatizó que lo importante es que se entreguen los antecedentes sean entregados a la justicia a fin de colaborar con la investigación.