El primer ministro holandés, Mark Rutte, dijo a su homólogo italiano, Matteo Renzi, que siente “vergüenza” por el comportamiento de hinchas del Feyenoord el jueves en Roma, donde llegaron a enfrentarse con la policía antes de un partido de la Europa League de fútbol.

“El primer ministro Mark Rutte contactó esta tarde con el primer ministro italiano Renzi”, indicó Herman Quarles Van Ufford, uno de los portavoces gubernamentales, en una declaración transmitida por correo a la AFP.

“Mark Rutte calificó de horrible el mal comportamiento y los daños causados, asegurando que siente vergüenza por sus compatriotas”, añadió la misma fuente.

Antes del duelo del jueves en la ida de dieciseisavos de final de la Europa League entre Roma y Feyenoord (1-1), más de 500 hinchas neerlandeses se enfrentaron con la policía italiana en la plaza de España, en el centro de la ‘Ciudad Eterna’.

La Barcaccia, fuente del siglo XVII en forma de barco y que está en el centro de la plaza, apareció dañada y repleta de basura, principalmente botellas y latas.

Dieciséis policías resultaron heridos y decenas de aficionados fueron detenidos. En una intervención en televisión, Renzi se mostró muy enfadado por lo ocurrido.