En el marco de la campaña de fiscalización a locales de venta de útiles escolares, la Seremi de Salud de la Región Metropolitana llamó a la ciudadanía, a revisar que los productos escolares cumplan con las exigencias reglamentarias.
El barrio comercial Meiggs y una sucursal de Lápiz López recibieron la visita del Seremi de Salud, Carlos Aranda, para fiscalizar que los productos escolares cumplan con los requisitos de calidad y tengan todas las indicaciones en español.
A la fecha se han realizado 40 fiscalizaciones en librerías de todo Santiago, con 13 sumarios sanitarios. A estas cifras se agregó la librería Lápiz López, con una retención de productos y un sumario.
El Barrio Meiggs, en cambio, cumple con la normativa, según señaló el Seremi de Salud Carlos Aranda, quien sostuvo que hay ciertas cosas en las que hay que fijarse a la hora de comprar útiles escolares: si tiene un alto contenido de tolueno y plomo, y si tiene los rotulados o etiquetas con las advertencias del producto.
Hernán Calderón, presidente de la Corporación Nacional de Consumidores y Usuarios, Conadecus, expresó que es fundamental fiscalizar los productos escolares para proteger a los niños.
La recomendación para quienes compren los útiles escolares, según señaló el Seremi de Salud, es que compren en locales establecidos, que lean la rotulación o etiquetado y se revisen los riesgos del producto para los niños.
Los resultados de la fiscalización de útiles escolares en la Región Metropolitana estarán disponibles a mitad de marzo.