La infertilidad es una enfermedad que afecta a la pareja inhabilitándola para lograr la fecundación o un embarazo de término luego de un año de tener relaciones sexuales sin protección de un método anticonceptivo. Entre las causas de infertilidad, un 25% corresponde a algún factor de origen femenino, siendo la endometriosis una de ellas.
“La endometriosis en una enfermedad caracterizada por la presencia de tejido endometrial (capa que reviste al útero internamente), fuera de la cavidad uterina. Afecta entre un 2% a un 4% de las mujeres en edad reproductiva y es diagnosticada en un alto porcentaje de mujeres infértiles”, declara Maricela Pino, matrona y académica de Obstetricia de la Universidad San Sebastián.
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El principal síntoma de la endometriosis es el dolor pélvico y, pese a que puede ser muy variable en cuanto a su presentación e intensidad, lo habitual es que se manifieste previo o durante la menstruación. Se origina por el sangrado cíclico del tejido localizado fuera de su lugar habitual.
Maricela Pino explica que “también es común la presencia de dolor durante las relaciones sexuales. En otros casos, la enfermedad puede ser silenciosa, siendo diagnosticada en el momento de realizar estudios por infertilidad”.
“Diversas investigaciones han demostrado que existe una clara asociación entre la endometriosis y menores tasas de fecundación e implantación de embriones en mujeres que padecen esta patología y que han sido sometidas a procedimientos de fertilización asistida. Las causas de esta asociación no se conocen claramente, sin embargo es probable que el ambiente pro-inflamatorio, el daño tubario y la formación de adherencias favorezcan este fenómeno”, explica la docente de la Universidad San Sebastián.
El tratamiento de la endometriosis depende de cada caso en particular y se deben evalúan criterios como el tipo y extensión de la enfermedad, síntomas asociados, calidad de vida y deseo reproductivo.
“El tratamiento definitivo aceptado actualmente es la cirugía laparoscópica que puede realizarse durante el mismo procedimiento diagnóstico, en el cual se extraen las lesiones que provocan los síntomas. En estas pacientes se ha observado una mejoría en las tasa de fecundidad posterior”, afirma la matrona.
Una gran interrogante es cuándo consultar a un médico. Maricela Pino recomienda que frente a síntomas como dolor menstrual intenso y progresivo que no responde a tratamientos con anti-inflamatorios comunes y en caso de presentan ciclos menstruales cortos o menstruaciones abundantes, las mujeres deben acudir a su ginecólogo para facilitar el diagnóstico precoz. Lo peor que puedes hacer es ignorar estos síntomas y creer que son “normales”
