Alemania e Italia anunciaron el viernes el cierre temporal de sus embajadas en Yemen y la repatriación de su personal debido a la creciente violencia en este país.

Similares decisiones fueron tomadas en los últimos días por Francia, Reino Unido y Estados Unidos respecto a sus embajadas en Saná, debido al deterioro de la situación en la capital yemení, controlada por las milicias chiitas hutíes.

El jueves el secretario general de la ONU Ban Ki-moon expresó su preocupación por el “derrumbe” de Yemen, donde Al Qaida se ha apoderado de importantes cantidades de armas en una parte del país que escapa al control de las milicias hutíes.