A un mes del inicio del año escolar, la Superintendencia de Educación comenzará un proceso de fiscalización. La idea es evitar irregularidades en las exigencias que realizan los establecimientos.
El miércoles 4 marzo se inicia oficialmente el año escolar, y para esa fecha los más de 300 mil alumnos de enseñanza básica y media de la región deberán volver a las salas de clases.
Si bien aún están de vacaciones, muchos apoderados comenzaron a comprar la lista de útiles y el uniforme.
Ante este panorama el director regional de la Superintendencia de Educación, Dalton Campos, recordó que los establecimientos no pueden exigir marcas en la lista de útiles, salvo que la petición esté relacionada con la seguridad de los niños.
Tampoco se puede indicar el lugar donde comprar el producto. Además la autoridad destacó que en el caso de los establecimientos municipales y particulares subvencionados, se pueden solicitar libros para determinadas asignaturas, pero el apoderado no está obligado a comprarlos.
La Superintendencia de Educación ya distribuyó un instructivo a los todos los establecimientos de la región y el país, sobre este tema. En la zona, la próxima semana comenzará un proceso de fiscalización.
Ante cualquier consulta o reclamo, los apoderados pueden dirigirse a las oficina de la Superintendencia de Educación o bien ingresar al sitio web de este organismo.
