El subsecretario (s) de Salud Pública, Pedro Crocco, recorrió durante este jueves el terminal de buses San Borja en Santiago para dar a conocer a los veraneantes que se dirigen a la costa la presencia de la medusa fragata portuguesa.

La idea era advertir a la población de qué hacer al tener contacto con este animal, ya que muchas veces se toman medidas que pueden empeorar la situación. Además, fueron con un ejemplar para ayudar a su reconocimiento (fotografía superior).

Pedro Crocco conversó con Podría ser otra cosa sobre este tema. Allí comentó que es un fenómeno poco común en el país, debido a que generalmente su presencia se da en aguas más templadas.

El profesional detalló que en las playas afectadas habrá una bandera amarilla, con el fin de que la gente no ingrese al mar.

Si es que alguien resulta picado, dijo, se sentirá un dolor como una quemadura y enrojecimiento de la piel en la zona afectada. Para limpiarse, no hay que lavarse con agua dulce o vinagre, sino que sólo hay que hacerlo con agua de mar y sin frotarse con la mano, ya que se puede tener contacto con restos de la medusa. Posteriormente, hay que dirigirse a un centro asistencial.

Crocco advirtió que también puede ocurrir un contacto con esta especie en la arena, por lo que se recomienda caminar por la playa con zapatos y ropa.

Lo importante es evitar tocar una medusa a toda costa, ya que su veneno puede provocar problemas respiratorios e incluso un paro cardíaco. “En el mundo se han descrito tres muertes por picaduras de la fragata. Es raro, pero sí puede suceder“, afirmó.

Este verano, agregó, sólo se han realizado avistamientos de fragata en la Región de Coquimbo.

Escucha la entrevista completa realizada por Rayén Araya en Podría ser otra cosa: