La Red Salud de la Inversiones La Construcción (ILC), ligada a la Cámara Chilena de la Construcción, anunció que tampoco realizarán abortos en las 17 clínicas que la integran.

Recordemos que el Gobierno envió la semana pasada, el proyecto de ley que busca despenalizar la interrupción del embarazo en tres situaciones: cuando está en riesgo la vida de la madre, cuando el feto de inviable y cuando hubo una violación.

La medida no sólo ha presentado oposición por parte de los partidos políticos de derecha, sino que al menos tres recintos privados de salud ya habían afirmado que no efectuarían abortos.

Se trata de la Clínica de la U. Católica, la Clínica de la U. de Los Andes y el Hospital Parroquial de San Bernardo, todos ligados a la Iglesia Católica. Éstos dijeron que se acogerían a la objeción de conciencia, que es un artículo de la legislación permitiría que los médicos se negaran a llevar a cabo un aborto.

No obstante, la oposición no acabó ahí, ya que ahora la Red Salud de la ILC también se negaría a practicar el procedimiento, según informó el Diario Financiero.

Ésta la integraran las clínicas Tabancura, Bicentenario, Avansalud, Arauco Salud, Clínica Iquique y Hospital Clínico de Viña del Mar, además de la red regional de 11 centros asistenciales, que son: Clínica Portada, Clínica Atacama, Centro Médico Atacama, Clínica Elqui, Clínica Valparaíso, Clínica Integral, Clínica Lircay, Hospital Clínico del Sur, Clínica Mayor, Clínica Puerto Montt y Clínica Magallanes.

Ricardo Silva, gerente general de la entidad, declaró a Diario Financiero que la razón del rechazo es que comparten la visión del rector de la PUC, Ignacio Sánchez, sobre defender la libertad de conciencia.

El ejecutivo agregó que “obviamente el aborto pasa a ser legítimo si se deja de considerar un delito, pero dentro del marco legal tiene que haber espacio para que la gente tome decisiones. Si no, estamos hablando de una sociedad fundamentalista”, afirmó.