Se disputaba el clásico sudamericano entre los seleccionados Sub20 de Brasil y Argentina por el hexagonal final en Uruguay cuando el delantero trasandino Giovani Simeone protagonizó una increíble jugada que no terminó del todo bien.

En una contra de Argentina, el balón quedó rebotando en el área y el hijo del “cholo” Simeone en posición inmejorable fue a convertir, pero su remate salió hacia arriba chocando de lleno con el travesaño, errando un gol increíble en boca del arco.

El disparo pudo haberse convertido en el primer tanto de Argentina, pero aún así el conjunto trasandino se quedó con la victoria ante los brasileños por 2-0.