La empresa española Abengoa inició, en la comuna de María Elena, la construcción de la planta fotovoltaica de Atacama 1, el mayor complejo solar de América Latina.

La ceremonia contó con la presencia del superintendente de Electricidad y Combustibles del Ministerio de Energía, Luis Ávila, y del alcalde Jorge Godoy, quienes elogiaron el comienzo de la monumental obra en pleno desierto de Atacama, a 1.368 kilómetros al norte de Santiago.

El representante de Abengoa Chile, Iván Álvarez, dijo que recientemente el Gobierno ha abierto espacios como este para generar energías limpias que entren al sistema de licitación de energía.

“A Abengoa le fue adjudicada un bloque importante de suministro para todo el país. Creemos que con estos proyectos podemos generar más energía de manera eficiente, sustentable, limpia y a precios competitivos”, aseveró Álvarez.

Por su parte, el intendente de la región de Antofagasta, Valentín Volta, dijo que “estamos felices por María Elena, felices por la región y felices por la energía que se va a integrar al sistema interconectado nacional”.

Según sus organizadores, el proyecto cuenta con la mayor radiación solar en todo el mundo, ya que Atacama 1 estará formado por una planta fotovoltaica con una capacidad de 100 megavatios y por la primera planta termosolar de América Latina, con 110 megavatios de capacidad y 17,5 horas de almacenamiento térmico. En conjunto, el campo solar del complejo alcanza las 1.000 hectáreas.

La planta voltaica, que será la más grande en su categoría en el Norte Grande, constará de 392.000 paneles que captarán la energía del sol para transmitirla directamente a la red.

Por su parte, la planta termosolar, cuya construcción comenzó en 2014, tendrá 10.600 heliostatos con una superficie total para el campo solar de más de 700 hectáreas.

Los heliostatos concentran la radiación solar en un punto, el receptor, ubicado en la parte superior de una torre de 250 metros de altura.

La radiación del sol se emplea para calentar sales fundidas que se utilizan para generar vapor con el que se alimenta una turbina de 110 megavatios que genera electricidad limpia. El sistema de almacenamiento térmico de sales fundidas permitirá entregar energía de forma estable durante las 24 horas del día.

Según la firma, el complejo evitará la emisión de unas 870.000 toneladas de dióxido de carbono (CO2) al año y permitirá responder a la demanda de energía de la población y de la industria gracias a la combinación de ambas tecnologías.

Se estima que la planta fotovoltaica entrará en operación a fines de 2015 y la planta termosolar durante el segundo trimestre de 2017.

Abengoa, líder mundial en soluciones para el desarrollo sostenible en energía y medioambiente, está presente desde 1987 en Chile, país en el que ha desarrollado numerosos proyectos para importantes compañías mineras, empresas eléctricas, de comunicaciones y del sector industrial en general.