El Tribunal Oral de Arica condenó a Jorge Soto Espinoza por su responsabilidad en el delito de declaración maliciosa de impuestos tras presentar en diversas ocasiones facturas falsificadas, recibiendo a partir de ello millonarios montos por concepto de devolución de impuestos.

De acuerdo a lo investigado por la Fiscalía, Soto no sería el único involucrado, sino que también se condenó a dos funcionarios municipales quienes facilitaban las facturas.

Los hechos habrían quedado al descubierto luego que el Servicio de Impuestos Internos (SII) detectara irregularidades en las declaraciones de impuestos a la venta y servicios de la empresa.

Tras una exhaustiva investigación se logró determinar que Soto aumentó ilícitamente su crédito fiscal por impuestos al valor agregado mediante la contabilización y registro de facturas falsas, un hecho que le permitió recibir mayor monto de dinero por concepto de devolución y causar perjuicio al Fisco por un total de $51 millones.

Tras lograr probar los delitos, el empresario ariqueño fue condenado a 2 años de pena remitida y a pagar una multa de más de $25 millones por lo defraudado. En tanto, los otros dos involucrados, Eduardo Gallardo Ponce y Juan Carrio Calderón, se les imputó el delito de facilitación de facturas falsas, condenándolos a 540 días y 300 días de presidio.