Un empresario procesado por lavado de dinero, que supuestamente actuó como mediador en el escándalo de la petrolera estatal brasileña Petrobras, podría obtener millones de dólares y una pena reducida si guía a los investigadores hasta el dinero fruto de los sobornos, según su abogado.

“No es un privilegio. Por el contrario, fue negociado estrictamente de acuerdo con la ley”, dijo el abogado de Alberto Youssef, Antonio Figueiredo Basto, en declaraciones recogidas por el diario Globo.

Youssef, detenido el año pasado junto al exdirector de Abastecimiento de Petrobras Paulo Roberto Costa -principal delator de la red de corrupción-, está cooperando con los investigadores en el marco de un acuerdo por el que podría, si se lo declara culpable, obtener una pena reducida de hasta cinco años de cárcel.

Según Globo, los abogados de Youssef negociaron un acuerdo por el cual además recibiría 2% del dinero recuperado de los sobornos. Según la policía federal, la red de corrupción movió unos 4.000 millones de dólares en la última década.

Los investigadores han dicho públicamente que esperan recuperar hasta 390 millones de dólares de los sobornos resultantes de contratos inflados de la petrolera que supuestamente beneficiaron a decenas de políticos.

Si se alcanza este monto, Yussef -quien según la fiscalía actuaba como mediador de Costa- estaría recibiendo 7,7 millones de dólares en compensación por su cooperación.

El escándalo de Petrobras, por el que ya están procesadas 39 personas, alcanzó esta semana también al exjefe del gabinete de Luiz Inacio Lula da Silva, José Dirceu.

Las autoridades brasileñas investigarán las cuentas de Dirceu, quien fue condenado en 2012 a siete años y 10 meses de cárcel por corrupción en el sonado caso conocido como el ‘Mensalao’ (gran salario), en el que el gubernamental Partido de los Trabajadores (PT, izquierda) –al que pertenece Dirceu, Lula y la presidenta Dilma Rousseff– creó una contabilidad paralela y pagó sobornos a legisladores a cambio de votos en el Congreso.