La noche del domingo pasado el periodista argentino, Damian Pachter, a través de su cuenta de Twitter dio indicios de que “algo” ocurría con el fiscal Alberto Nisman, quien días antes acusó a la presidenta de Argentina de encubrir a Irán en el atentado contra mutual judía de 1994.

“Me acaban de informar sobre un incidente en la casa del Fiscal Alberto Nisman”, fue el primer mensaje que advirtió por las redes sociales. Minutos después agregó que había sido encontrado sin signos vitales.

Tras varias hipótesis sobre la muerte de Nisman, y una postura contradictoria por parte del gobierno argentino, a una semana de este hecho el periodista decidió abandonar el país. Según comentó, sus fuentes le habían alertado sobre su seguridad, y señaló que lo más probable era que no regresara al país durante el gobierno de CFK.

Según consigna el medio trasandino La Nación, Pachter decidió abandonar argentina tras sentir que era perseguido.

“Tenía gente esperándome en mi casa”, agregando que “Nunca me imaginé que después de ese tuit, en cinco días me tendría que ir del país y con evidencias reales”. También señaló a colegas del diario Clarín e Infobae que volvería al país sólo cuando sus fuentes se lo recomendaran.

Asimismo, el periodista de Infobae, que lo acompañó antes que abordara el avión señala que Patcher manifestó que “Me voy porque mi vida corre peligro”. Sumando a esto indicó que “No sé desde cuando es que me empezaron a seguir. No voy a contar nada todavía, pero si puedo decir que recibí un mensaje del Estado que yo lo entendí como un mensaje hacia mí, luego lo chequeé y efectivamente fue así”.

El polémico tuiteo de la Casa Rosada

La trama de esta arista de la muerte del fiscal tuvo un nuevo episodio luego de que la cuenta oficial de la Casa Rosada en Twitter publicara la información de los pasajes comprados por Patcher, desmintiendo que no tuviera regreso.

Según la información oficial del gobierno argentino, el periodista tiene vuelo para volver a su país el 2 de febrero.

La cuenta, aparte de retuitear artículos de medios de comunicación del Estado y afines a la gestión de Cristina Fernández, también se dedica a ridiculizar la labor de periodistas críticos al gobierno, además de cuestionar las portadas del diario Clarín, en abierto conflicto con el Poder Ejecutivo argentino.

Antes de partir, y en conversación con el mismo Clarín, Patcher indicó que si se hubiese quedado en el país “el kirchnerismo me hubiera destruido a través de los medios. Estoy muy marcado. No sé cuanto podrían haber hecho con la legitimidad que tienen ahora. La sensación que viví hoy y tengo ahora es que me iban a liquidar. No les voy a decir adonde pertenece esa gente, pero es lo peor de lo peor”.

“Me voy porque mi vida corre riesgo. Acá no puedo estar más. No puedo volver más al país, al menos hasta el final de este Gobierno. Estoy muy marcado. Estuvo jodido en serio. Recibí un mensaje y a partir de esto pasó otra cosa más. Ahí se confirmó todo”, agregó.