La noche del jueves, grupo de 20 habitantes del sector de Liquiñe se tomaron de manera pacífica el terreno perteneciente a la planta hidroeléctrica abandonada en la comuna.

Según el representante de los lugareños, César Catalán, la propiedad de 2 hectáreas, se encontraría actualmente saneada a nombre de la planta hidroeléctrica, pero existe un vacío en cuanto a sus reales propietarios, debido a que en 1985 los terrenos del sector se mesuraron, entregándoles título de dominio a los vecinos y a la empresa, sin embargo desde 1996 a la fecha, el sitio indicado permanece abandonado y presenta un gran deterioro.

Catalán indicó que cuentan con el apoyo de la municipalidad y solicitan que si el lugar no tiene dueños reales, sea declararlo patrimonio cultural, por ser una empresa con más de 40 años, y así poder realizar en el sitio sobrante un gimnasio, el que consideran necesario para la comuna.

Hasta el lugar llegó el Intendente, Egon Montecinos y el Seremi de Bienes Nacionales, quienes se encuentran en reunión con los vecinos de Liquiñe para atender sus demandas.