Dinamarca, subcampeón del mundo en 2013, se aseguró su clasificación a octavos de final del Mundial 2015 de balonmano masculino, igual que Alemania y Polonia, en el Grupo D, en la cuarta jornada de la primera fase, este jueves en Doha.

Tras empatar con Argentina (24-24) y Alemania (30-30), y ganar a Arabia Saudí (38-18), Dinamarca firmó este jueves su primera victoria significativa del Mundial al derrotar a Rusia (31-28).

Los escandinavos se mostraron por fin convincentes, con un 8-0 en los 11 primeros minutos.

Con un Rasmus Lauge Schmidt brillante (9 goles), administraron después los treinta últimos minutos, sin dejar nunca a los rusos acercarse a menos de tres goles.

Rusia se jugará su pase a octavos de final en el último partido, contra Argentina, que plantó cara durante mucho tiempo este jueves a Alemania, antes de derrumbarse en los últimos diez minutos para perder (23-28), víctima del guardameta germano Carsten Lichtlein (15 paradas).

Alemania, que jugará su último partido contra Arabia Saudí, debería terminar primera de ese grupo D.

Polonia, que se paseó ante los saudíes (32-13), y Dinamarca, se enfrentarán en la última jornada para decidir qué equipo termina segundo, siendo el otro tercero.

Suecia y Francia, que tienen aseguradas las dos primeras plazas del Grupo C, y se enfrentarán en el último partido, vivieron este jueves una jornada difícil.

Suecia solo pudo empatar con Egipto (25-25), que ganaba por cuatro goles de diferencia a ocho minutos del final (24-20) sin poder mantener ese ritmo.

Francia sufrió para ganar a Argelia (32-26). Los campeones de Europa tuvieron una ventaja significativa en el primer período (19-12), pero dejaron al final acercarse al conjunto magrebí.

Suecia, Francia y Egipto ya estaban clasificados para octavos de final. Pero todo sigue abierto por la cuarta plaza, última que da acceso a la siguiente ronda, tras la sorprendente victoria de la República Checa sobre Islandia (36-25).

Los checos, que se enfrentan a Argelia el sábado, están ahora en situación favorable para acceder a octavos.