La jueza Karen Atala denunció que el Estado de Chile no ha cumplido con el fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que lo condenó por discriminación en el año 2012, obligándolo a capacitar a funcionarios estatales para garantizar la igualdad de trato a personas sin importar su orientación sexual.

Casi tres años han pasado desde que la Corte Interamericana de Derechos Humanos condenara a Chile por discriminar a la jueza Karen Atala y quitarle la tuición de sus hijas por su homosexualidad según un fallo de la Corte Suprema del año 2004.

Junto con dictaminar los actos reparatorios hacia Atala, el fallo obligó al Estado chileno a capacitar a los funcionarios estatales para garantizar la igualdad de trato a personas sin importar su orientación sexual.

Según Atala, los tres poderes del Estado no han cumplido con este mandato que busca evitar la discriminación en el servicio público por condición sexual, raza, etnia o situación económica.

Cabe señalar que en diciembre, el Gobierno inició la última etapa de cumplimiento del fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en el caso de Atala.

Recordemos que la sentencia, emitida en marzo de 2012, determinó el pago de una indemnización de 72 mil dólares para la jueza, un acto público reparatorio y planes de apoyo médico y psicológico para ella y sus tres hijas.