La presidenta surcoreana, Park Geun-hye, se declaró dispuesta este lunes a reunirse sin condiciones previas con el líder norcoreano, Kim Jong-un, para conversar de los puntos de discordia, en particular la desnuclearización de la península.

En su discurso, la presidenta Park expresó su voluntad de “reunirse con quien sea” con tal de reducir las tensiones entre ambos países y de obrar en pro de la reunificación a poco que sus interlocutores manifiesten su “sinceridad” para avanzar.

Seúl propuso a finales de diciembre unas discusiones de alto nivel sobre la dolorosa cuestión de la reunión de las familias separadas por la guerra.

Pyongyang aún no ha respondido pero tres días después Kim Jong-un dijo que estaba dispuesto para unas conversaciones “al máximo nivel” con Corea del Sur.

Ambas Coreas parecen querer guardar la iniciativa de la mano tendida. Park repitió este lunes que el Norte debe responder primero “de manera proactiva” a su ofrecimiento de diálogo sobre la reunión de familias.

Park Geun-hye insistió este lunes en que el tema nuclear es el nudo gordiano de las relaciones intercoreanas.

“La cuestión de la desnuclearización espera un arreglo desde hace tiempo (…) No podemos hablar de reunificación pacífica dejándola pendiente”, dijo.