Es elemental escoger selectivamente el calzado. Desde su estética hasta la comodidad, los zapatos deben cumplir una serie de características para ajustarse a todas la necesidades del usuario. En el caso contrario, seleccionar mal puede graves consecuencias médicas.

No cabe duda que existen un sinfín de ejemplares en materia de calzados. Cada característica ayuda a personificar el zapato y adaptarlo a las exigencias del consumidor. Pero aún así, existen algunos que los expertos recomiendan no usar o evitar en lo posible su uso, debido a los daños que ocasiona.

Gerard Evans, Podólogo del Hospital General de Singapur, enumeró cuatro tipo de zapatos que perjudican la salud del usuario y recomienda evitar. Tampoco se trata de suprimir su uso totalmente, si no más bien, de no exagerar con ello y sólo utilizarlo cuando es realmente necesario.

1. Sandalias

Tara (CC)

Tara (CC)

Populares por su sencillez y facilidad de uso, las sandalias son del tipo de calzado menos recomendados por los podólogos. Gerad explicó que al ser demasiado planas, delgadas y abiertas, pueden traer muchos problemas en los pies.

No frecen ayuda de arco, amortiguación en el talón o resistencia a impactos. Las flip-flops son en peor enemigo de las personas que padecen de pie plano, pues “pueden acelerar sus problemas”, destacó el doctor.

Además, la correa que se encuentra entre el dedo pulgar y el segundo dedo, también puede ser peligrosa ya que obliga a los músculos del pie a un exceso de agarre, lo que puede conducir a una lesión por sobreuso. Estas lesiones pueden derivar en deformidades de los dedos, como los “dedos en martillo” o en garra, casos comunes en clínicas de podología, señaló el experto.

2. Tacones altos

HeelsandFeet (CC)

HeelsandFeet (CC)

No es un secreto que los zapatos con tacones son perjudiciales para la columna. Incluso muchas mujeres sufren diversas molestias derivadas de su uso. El podólogo explicó que lo anterior se debe a que este tipo de zapato desplaza el peso a la parte delantera del pie, lo que aumenta la presión en esta área y por lo general conduce a dolor del antepié.

Los tacones altos también crean un problema de equilibrio. Al forzar las rodillas y las caderas hacia adelante muchas personas pueden sufrir graves dolores y molestias en la espalda y piernas.

Respecto al dolor del antepié, Evans explicó que por cada 2,5 cm de talón aumenta en un 25% la transferencia de peso corporal a su parte delantera, lo que explicaría las fuertes molestias.

En tanto, el uso de tacones altos también aumenta el riesgo de sufrir tropezones, juanetes y dedos en martillo, problemas que a menudo pueden ser permanentes y pueden requerir corrección quirúrgica.

3. Zapatos muy amplios (Zuecos y Crocs)

Pietro Bellini (CC)

Pietro Bellini (CC)

Este tipo de calzado se ha vuelto muy popular recientemente; sin embargo, nunca fue destinado a ser utilizado para caminar largos tramos. El zapato se desarrolló originalmente como calzado spa.

Según el doctor, debido a que la zona de los dedos tiene demasiado espacio y la prenda no cuenta con una correa ajustable, el pie puede moverse mucho, lo que lo lleva a ser inestables y provocar molestias.

4. Zapatillas de ballet

Christine Urias (CC)

Christine Urias (CC)

Este tipo de calzado fue diseñado exclusivamente para los bailarines de ballet, primer punto a considerar antes de usarlo. Además, los zapatos que son demasiado planos no proporcionan un soporte adecuado en el arco, que es sobre todo un problema para los que tienen los pies planos, aseguró el doctor.

En tanto, como las plantas de la zapatilla de ballet son muy finas, no brindan el soporte necesario para mantener el cuerpo y traspasan esa responsabilidad a la planta del pie. También hay un mayor riesgo de que la suela sea perforada por un objeto extraño.

Las características de un zapato adecuado

Además de nombrar los calzados que se deben evitar, el experto señaló algunos tips a considerar antes de comprar un zapato y así evitar accidentes, problemas de salud y otras molestias provocadas por un mal uso de calzado.

Gerard Evans destacó que el precio no es un factor que defina la calidad del zapato. Un buen calzado puede ser más barato que uno inadecuado y algunas marcas famosas no garantizan que el zapato sea de calidad. En tanto, resaltó que las características a considerar dependen de la comodidad de este.

1. Ajustable: El zapato debe contar con una correa ajustable, ya sean cordones o velcro que permitan una adaptación en función de las necesidades del individuo.

2. Estable: El talón de los zapatos debe ser suave y estable, evitando el movimiento vertical u horizontal.

3. Amplia suficiente: Debe existir suficiente espacio (ancho y profundidad) en la parte delantera del zapato para los dedos del pie. Durante una caminata normal los dedos de los pies se extienden y alarga hasta un centímetro en cada dirección. Por lo tanto, se debe escoger un zapato que sea más largo que el dedo más prolongado en aproximadamente la anchura del pulgar.

4. Max 2.5cm del talón: . El talón del zapato no debe ser superior a 2,5 cm de altura. De lo contrario, el talón y el tobillo se vuelven más inestables y, por lo tanto, propensos a esguinces y dolor parte delantera del pie.

5. En buen estado: Es mejor desechar los zapatos que se usan demasiado, ya que probablemente perdieron algunas de sus funciones básicas. Incluso, ir a correr en zapatillas deportivas gastadas aumenta el estrés y el impacto en piernas y articulaciones, lo que puede conducir a lesiones por uso excesivo. Se sugiere que un par de zapatos para correr debe cambiarse cada 500 a 650 kilómetros.