Los feriantes de Collao están preocupados por el inminente traslado debido a las obras del Estadio Municipal. Algunos de ellos temen que sean erradicados para siempre.

La feria libre de Collao tiene más de 60 años de historia y abarca a cerca de 200 personas, algunas de ellas son integrantes de familias que subsisten de este trabajo desde hace décadas.

Por eso están preocupados por el traslado que debe cumplirse a más tardar el 16 de febrero, porque puede significar el primer paso para erradicarlos definitivamente del ingreso al estadio.

Los feriantes proceden de localidades como Santa Juana, Hualqui, Yumbel y Florida, además de Concepción.

Sara Muñoz, secretaria del sindicato “Despertar Campesino”, advirtió al alcalde Álvaro Ortiz que darán la batalla por conservar su lugar.

Por su parte, el alcalde aclaró que nadie ha planteado un cierre definitivo de la histórica feria libre.

Ortiz abogó por conciliar posiciones y encontrar una solución, comenzando por definir el sector donde la feria se instalará de forma transitoria.